¿Las apps solo se usan en teléfonos móviles? ¿Una página web es lo mismo que una aplicación en la nube? ¿Facebook es una página web o una red social? ¿Una red social es diferente a una página web?

Este post nos ayudará a entender mejor qué es cada una de estas tecnologías y para qué sirven.

Páginas web, aplicaciones, web, apps y redes sociales coexisten en el maravilloso pero cada vez más intrincado mundo de Internet. Empezaremos describiendo la más importante y difundida de estas herramientas, que contrario a lo que se puede pensar, no son las redes sociales ni las apps, sino las páginas web. En sentido amplio, ¡las páginas web son casi todo en Internet! Hay más de 4.470 millones de páginas web en la madrugada de hoy mientras se escribe este artículo, de las cuales permanecen activas un poco más de mil millones. Pero mañana habrá algunos miles más. Parece una locura que existan tantas, pero así es: las páginas web son aún el elemento dominador de internet, son las hojas del árbol del conocimiento digital, son la visita guiada y estructurada al conocimiento. Pero, además, son en su esencia públicas, no requieren autenticación y ofrecen contenido rastreable por los motores de búsqueda. Por eso siguen siendo tan importantes y necesarias para tener una buena presencia en Internet.

También tenemos las aplicaciones web. Técnicamente hablando las aplicaciones web son páginas web. La diferencia está en que las aplicaciones web están pensadas para desarrollar servicios en línea que la página web “normal” no hace, como por ejemplo intercambiar información sensible en un entorno web (hacer un pedido en línea y pagarlo) o utilizar herramientas de un sitio web que permiten editar una fotografía o un video y publicarlo en una comunidad, o crear un módulo para recibir pedidos de distribuidores y proveedores de un negocio de la vida real. Las aplicaciones web utilizan por lo general tecnologías especializadas para procesar información y devolver resultados al consumidor de internet.

Más informes en: Diseño y desarrollo de aplicaciones web

Ahora hablemos las apps. ¿Qué diferencia hay entre una app (o “un” app, es igual) y una “aplicación” de un PC? Ninguna: ambas se refieren a lo mismo, aunque hablar de una app suena más adecuado y contemporáneo. En esencia, las apps y las aplicaciones son piezas de software que se instalan en un dispositivo específico (un móvil, una tableta, un pc…) con un sistema operativo específico (iOS, Android, Windows, Mac OS, entre otros). A diferencia de una página web y una aplicación web, una app funciona diferente según el sistema operativo que la contiene: su aspecto gráfico puede cambiar, al igual que sus funcionalidades y objetivos. Depende del desarrollador de la app determinar qué usos ofrece en los diferentes sistemas operativos.

Y finalmente tenemos las redes sociales. ¿Qué son? Las redes sociales en realidad no son un concepto técnico, sino, como su nombre lo indica, son un concepto social. Una red social por lo general involucra una página web que permite a varios usuarios publicar e intercambiar información utilizando aplicaciones web y apps. Facebook, Twitter y LinkedIn, por ejemplo, utilizan diferentes plataformas para construir comunidad, combinando páginas web, aplicaciones web y apps que se complementan para consultar, publicar, comentar, chatear y votar la calidad de los contenidos, entre muchas otras posibilidades.

Ahora bien, ¿cuál de las anteriores herramientas (páginas web, aplicaciones web, apps, redes sociales) es la mejor? Eso depende de cada uno: de qué tipo de servicios y productos desea ofrecer, de qué tipo de presencia quiere desarrollar en la red y de cuánto tiempo y dinero está dispuesto a invertir.

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